domingo, 30 de mayo de 2010

Buen viaje

La primera vez que vi Easy Rider supuso una mayúscula decepción.

Tras años escuchando hablar de esta película o leyendo artículos quemencionaban (existió una era pre internet), como suele pasar en estos casos, las expectativas lo arruinaron todo. Había imaginado algo más,simplemente.
Hace unos meses un amigo me recomendó recuperarla pues, según él, de adulto era muy disfrutable.
No sin gran pereza, me dispuse a visionar el film y, para mi sorpresa, era algo totalmente diferente a la composición creada en mi mente.
Disfruté como un loco de las evoluciones del Capitan América y de Billy en su periplo por la América profunda. Esa que tanto fantaseamos con atravesar por la Ruta 66 y que, sospecho, no nos gustaría tanto como imaginamos.

A veces la memoria nos engaña, como en el caso de esta película. Otras, sin embargo,quizás sea mejor mantener el mito, o la imagen que uno crea en su cabeza, ya hablemos de los USA más profundos o de Dennis Hopper.
No me importan sus peleas con su mujer en los últimos días de su enfermedad, no me importan los, muchos, papeles en cintas de medio pelo.

Sé que Hopper rodó (en ambos sentidos) mucho y dió vida a muchos personajes, y que su viaje fue de todo menos Easy.
Le despedimos con uno de sus últimos trabajos. Un pequeño cameo, un guiño a su eterno personaje, en la película biker Hell Ride.
Buen viaje.

domingo, 23 de mayo de 2010

MERMELADA DE VINILO

Recuerdo, a mediados de los noventa, un programa de videoclips que se emitía hacia las 13 horas.

Hablo de la época en que Guns´n Roses estaban perdiendo su grandilocuente terreno en favor de pequeñas bandas aupadas por la industria. El grunge, aunque activo, desembocaba en una suerte de punk radio friendly (comparado con lo que hoy llaman punk en la FM, parecería hardcore) y de nueva hornada. Discos como Dookie (Green Day) o Smash (Offspring), con sus correspondientes clips, estaban día sí, día también en tu pantalla.

Mientras comía, estudiaba en turno de tarde, escuchaba esperanzado la lista de grupos que nombraba la presentadora (con su perfecto inglés) al inicio del programa, esperando que emitiesen ese que tan pocas veces había visto.

Rara vez me sonreía la fortuna, y casi siempre terminaba cambiando de canal, pues, los que mencionaban, no me interesaban o estaban ya aprendidos de memoria, como si de los Reyes Godos de fin de siglo se tratara.

Pero, eso sí, ocasionalmente mi energía (no tan) adolescente, se veía satisfecha con algún potente latigazo rock, grunge o como lo quieran llamar. Black Hole Sun o Spoon Man (Soundgarden), alguno de Nirvana, el divertidísmo Peaches (Presidents of the USA), disparaban mi imaginación musical.

Sin embargo, la canción que me ha incitado a escribir este texto... tenía algo más.

Cuando, muy de cuando en cuando, el programa en cuestión se decidía a poner este video, la fiebre se apoderaba de mi ser, siendo perentorio ver en directo a esta banda, incluso sin tener un céntimo (yo) y sin estar de gira (ellos) o, mejor aún, tocar con ellos (sin saber tocar nada). Observar al grupo agitarse en escena o al vocalista colgando de palcos de teatro o torres de sonido me dejaba atónito.

Unos doce años más tarde acudí al Azkena Rock, mas no me pude quedar a verles, y, ¡oh, infortunio! Interpretaron esta canción.

Habrá una nueva oportunidad de disfrutar de su directo dentro de mes y medio y espero estar allí.

Mientras tanto, continúen hipnotizados mirando fijamente cómo gira el círculo negro arañado por la aguja.

lunes, 10 de mayo de 2010

Y YA QUE SE ACERCA EL VERANO...

Con el ansia estival latiendo en mi interior, me permito rescatar una banda que me descubrió la maravilla del directo instrumental de serie B.

Tras el texto dedicado a Los Coronas me veo en la obligación (un placer en realidad), moral y ética, de recordar un combo que espero nos visite de nuevo pronto.

Les he visto en 4 ocasiones, siempre en estos meses que anuncian el verano, y siempre virtuosos, divertidos, uniformados, vestidos de negro, con su medallón al cuello y.... ¡enmascarados!

Oh sí, amigos, ¿qué más se puede pedir? ¡Surf instrumental y máscaras de luchador mexicano! ¡Coreografías y una sala a punto de explotar!

Damas y caballeros, como rezaban los posters de su primera gira por nuestra tierra ¡VIVAN LOS STRAITJACKETS!

CORONACIÓN SURF

Me sorprende no haber dado cancha todavía, dentro del blog, a semejante milagro.

Sobradamente asentados en el panorama nacional y surferos de secano (¡qué original!), Los Coronas asaltan el Blog.

El jueves 13 de mayo lleva neopreno, camiseta Pukas o patito de goma a la sala El Sol porque inundarán el local con olas de 12 metros.

Steve Van Zandt los quiso y tú los puedes tener por unos euros de nada.

Malasaña instro surf!



domingo, 9 de mayo de 2010

A LA VEJEZ VIRUELAS

Soy de esos jóvenes carcamales que aún no han asimilado que tenemos una herramienta como internet que, bien utilizada, puede ayudar en el día a día.

Más o menos un lustro después decomenzar a pinchar a una de esas bandas capaces de cambiar vidas, resulta que, de manera accidental descubro que han grabado algunos vídeos.

Buscando algo de Sonic Rendezvous Band, para ilustrar el programa sobre el Detroit Underground me encuentro con varios clips de The Solution (el vocalista en ambas bandas, con treinta años de diferencia, es Scott Morgan).

Sólo hay dos referencias de la banda (The Solution y The Solution won´t be Televised) s y rara vez han tocado en directo pero su alto octanaje emocional y soul power les hace dignos de fanatismo.

La solución:



PERDÓN, MR. WASHINGTON

Hace un par de semanas realizábamos en el programa el especial "Detroit Underground", escuchando a las figuras menos conocidas de la ciudad del motor.

Estrellas sin repercusión que, dentro o fuera de Motown o en los suburbios rockeros / garajeros, nunca suenan en los medios cuando se habla de Detroit.

Stooges, Sonic Rendezvous Band o Marv Johnson sonaron pero, como reconocí en antena, me olvidé de llevar un disco.

A pesar de tener prevista su emisión, me olvidé de Gino Washington, error convenientemente reparado en el siguiente programa.

Aún así permítanme presentarles al caballero que con sólo trece años ya escribía hits commo este.

sábado, 1 de mayo de 2010

IGUANA CHELI

Que ya vamos teniendo una edad...

Eso es lo que pensaba cuando el caballero de seguridad nos comentaba que Iggy & The Stooges saldrían a las 21:30, puntuales, según la entrada.

Esto de la edad es algo que mi espalda, tras la jornada laboral, dos horas de espera en la entrada del recinto y otra hora y media de espera, ya dentro de la sala, me recuerda a base de molestias, contracturas y otros achaques.

Dicen que el deporte no es sano, por suerte hace bastante que no lo practico. Ahora, eso sí, la asistencia a recitales con vistas a la primera fila, con el desgaste que conlleva, debería ser reconocido dentro de la categoría de decathlon.

Hacía mucho que no necesitaba agarrarme a la barrera antivuelco, como si fuera un resto de naufragio, para no ahogarme en la marejada humana y sus movimientos, sintiéndome apretujado, espachurrado, exprimido..... Y FELIZ.

¿Cómo no se puede disfrutar de un show que comienza con RAW POWER y SEARCH & DESTROY? ¿Un show donde Iggy la monta invitando al público a acompañarle en el escenario y lanzándose a la audiencia dos veces? ¿Donde Mike Watt da una solidez brutal con su bajo? ¿Donde, una tras otra, las canciones suenan como latigazos sexys y lascivos?

Damas y caballeros esta vez no voy a añadir a esta entrada ningúna foto ni aditivo similar. Un texto tan crudo como el concierto de anoche.

Yo me quedo con ese pitido de oídos, ese tinitus que, sospecho me acompañará en mi senectud (si llego) como los recuerdos de guitarras ardientes, sudor y sonrisas eternas.